jueves, 4 de junio de 2009
CIUDAD DE LAS ARTES Y LAS CIENCIAS
La ciudad de las artes y las ciencias, conocida en Valencia como "Ciutat de les arts i les Ciències", es el complejo de ocio cultural y científico más importante que se ha construido en Europa en los últimos años. Para ello se ha buscado un espacio muy amplio situado en el viejo cauce del río Turia, una arquitectura emblemática con vocación de futuro y unos contenidos de programación adaptados a los nuevos intereses sociales. Con esta ciudad artística, Valencia se ha engrandecido hacia el mar, pero eliminando parte de su huerta tradicional. Son tres los edificios que lo componen: "Museu de les ciències Príncep Felip", "l´Hemisfèric" y "l´Oceanogràfic".
El museo de las ciencias Príncipe Felipe es el edificio más grande, proyectado por Santiago Calatrava. Su gran estructura imita el esqueleto monumental de un dinosaurio. Dos terceras partes de sus, nada más y nada menos, 42.000 metros cuadrados, distribuidos en cinco plantas, están ocupados por exposiciones científicas, que selecciona y dirige el periodista Manuel Toharia.
L´Hemisfèric es el edificio que representa un ojo con párpado, proyectado también por Calatrava, y que fue el primero que se inauguró. Permite disfrutar de espectáculos audiovisuales presentados en tres dimensiones. Posee un sistema de proyección astronómica controlado por ordenador sobre una superficie de 24 metros de diámetro.
L´Oceanogràfic es un inmenso parque acuático concebido por el arquitecto Félix Candela como gran ciudad de peces y otras especies submarinas. En una superficie de 80.000 metros cuadrados se pueden visitar las torres y restaurante submarinos, el lago para demostraciones y los acuarios de los ecosistemas más importantes del mundo.
En los alrededores de esta interesante "ciudad" se encuentra "l´Umbracle" y el "Palau de les Arts".
L´Umbracle es un jardín con esculturas, protegido por una inmensa y ligera cubierta, situado sobre el aparcamiento, que constituye también un gran balcón y paseo para contemplar el conjunto de la "Ciutat de les Arts i les Ciències". Por su parte, el palau de les Arts es un edificio muy innovador construido, una vez más, por Calatrava, evocando las formas náuticas, para albergar grandes esoectáculos de ópera, danza y música. Es el último edificio a inaugurar del complejo cultural. Posee cuatro salas: la principal y el anfiteatro, ambas para 1.800 espectadores, y otras dos para 400.
miércoles, 3 de junio de 2009
PALAU DE LA MÚSICA
El Palau de música de Valencia, situado en el cauce del río Turia, fue forjado por José María de Paredes, premio nacional de arquitectura y también creador de auditorios como el de Madrid o el de Granada.
Desde que fuera inaugurado el 25 de abril de 1987, el Palau se ha convertido en uno de los edificios más emblemáticos de Valencia, siendo el encargado de difundir la melodía característica de la ciudad. Pero el Palau no solo está muy bien apreciado como un templo a la música, sino que también se reconoce por ser un gran ejemplo de arquitectura vanguardista. La fachada está recubierta por cristales, a través de los cuales se pueden admirar los jardines en los que está inmerso el Palau.
En el Palau de la música de Valencia se pueden apreciar grandes espectáculos: conciertos, presentaciones de ballet, óperas… Aquí se han presentado, y lo continúan haciendo los mejores maestros de la música.
Está conformado por diferentes salas: sala José Iturbi, sala Rodrigo, sala de exposiciones, además del vestíbulo de los naranjos.
Sala José Iturbi
La sala sinfónica puede albergar hasta 1.817 asistentes. Se distribuye las butacas en parte en abanico, frente y tras la orquesta, y el resto en palcos que envuelven a los músicos. Por ella, han pasado las más prestigiosas orquestas del mundo, directores y solistas.
Sala Rodrigo
Tiene un aforo de 423 plazas, que comporta un tiempo de reverberación de 1.5 segundos. Permitiendo así una mayor calidad y precisión en la definición de la música. Por ello está especialmente dedicada a solistas y música de cámara. Las butacas están distribuidas en un único graderío en abanico, esta vez escalonado. Ha acogido ciclos de Música Antigua y Barroca, Música Electroacústica, Percusión, Flamenco y audiciones para escolares. Las salas "Martín y Soler"y"Lucrecia Bori"
Las salas Martín y Soler y Lucrecia Bori,
Con capacidad para cien personas, han sido escenario de importantes conferencias sobre literatura, poesía y música. Camilo José Cela, Carlos Bousoño, Ana María Matute, Carmen Martín Gaite, Almudena Grandes, Vicente Molina Foix y Luis García Berlanga son algunos de los autores que han hablado sobre su obra.
Sala de Exposiciones
La Sala Expo del Palau se dedica especialmente a exposiciones plásticas de numerosos artistas plásticos. No obstante, se han realizado muchas muestras musicales tanto colectivas y benéficas.
Vestíbulo de los Naranjos
Considerado como un lugar simbólico del Palau por ser el espacio que incluye la gran bóveda de cristal que dota al edificio de personalidad. Tiene una superficie de mil metros cuadrados, a los que consagran un ambiente especial los naranjos de su interior. En él hay dos cafeterías situadas a ambos extremos.
Con más de 500.000 espectadores por año, el Palau de la Música de Valencia está considerado como uno de los núcleos musicales más importantes de Europa.
lunes, 1 de junio de 2009
VALENCIA, EN EL SIGLO XX, UNA NUEVA ERA
A principios de siglo Valencia era una ciudad industrializada. Mientras la producción de curtidos hacía lo que podía, la industria sedera dejaba de ser una de las líderes. La industria que se iba imponiendo, sin embargo era la de la metalurgia, la alimentación y la madera. Aunque las pequeñas empresas eran más abundantes, poco a poco se fue introduciendo un tipo de producción para la gran industria. La mejor expresión de esta dinámica eran las exposiciones regionales. Nacía la Feria Internacional de Muestras.
Pero no todo a principios de siglo fue esplendor. Aunque se había conseguido un importante progreso económico, se vivía una profunda crisis provocada por el poco apoyo que tenía en las urnas el sistema bipartidista de la Restauración, además de la pérdida de Cuba y del creciente organización de los obreros en diferentes grupos radicalizados por la situación que se vivía. En Valencia fue el partido de Blasco Ibáñez (republicano) el que con gran número de seguidores gobernaría casi ininterrumpidamente entre 1901 y 1923.
La primera guerra mundial no pasó inadvertida para los valencianos. Se acumularon demasiadas exportaciones de cítricos produciéndose colapsos. Esto llevaría a un incremento desmesurado de los precios y que los mercados no estuviesen los suficientemente aprovisionados.
Durante la dictadura de Primo de Rivera, disminuyeron los conflictos sociales, pero la radicalización política siguió más vigente que nunca. El movimiento obrero fue consolidando su organización sindical, mientras los sectores conservadores se agrupaban en torno a la Derecha Regional Valenciana.
En las elecciones locales que se celebraron el 12 de abril de 1931, ganó la coalición de partidos republicanos. Alfonso XIII renunció al trono y abandonó el país, fue cuando se proclamó la Segunda república el 14 de abril. Esta etapa se caracteriza por la convulsión social casi permanente.
Las cosas cambiarían cuando en 1933 subió al poder el frente conservador. Supuso que los blasquistas llegaran a las esferas más altas de poder, pero al mismo tiempo fue la caída del partido por un excesivo consevadurismo.
Las elecciones de 1936 fueron ganadas por el Frente Popular y el Ayuntamiento de Valencia fue disuelto, pasando sus competencias a una comisión gestora.
El levantamiento militar del 18 de julio de 1936 no tuvo éxito en Valencia. La capital de la República se instaló en Valencia en noviembre de 1936: el gobierno se instaló en el palacio de Benicarló, y los ministerios ocuparon determinados palacios. La ciudad sometida a constantes bombardeos tanto por aire como por mar, llevó a la rendición de la ciudad el 30 de marzo de 1939 cuando las tropas del General Franco entraron en ella.
Con la Dictadura se prohibieron los partidos políticos y se llevó a cabo una implacable represión ideológica. Valencia sufrió, además, el 14 de octubre de 1957, la peor riada de su historia.
Los años sesenta fueron de total recuperación económica para Valencia que supuso un gran crecimiento demográfico además de la construcción de importantes obras urbanísticas y de infraestructuras, como lo fue el Plan Sur para construir un cauce alterno al río Turia que evitara futuros desbordamientos. También se mejoraron los accesos y se iniciaron reformas interiores.
En 1975, con la muerte del general Franco, se inició el proceso de transición democrática. La aprobación de la Constitución Española de 1978, el Estado de las Autonomías y con ello la transferencia de competencias a la Comunidad Valenciana, constituyen momentos importantes de nuestra historia reciente. La democracia propició la recuperación de la lengua y la cultura valenciana.
Pero es a partir de los años 80/90 cuando la ciudad de Valencia mayor auge ha tenido en cuanto a transformación en todos los ámbitos de la ciudad. Se han llevado a cabo proyectos de todo tipo, desde la Ciudad de las Artes y las Ciencias, el Congreso, el Palau de la Música, el IVAM o parques y zonas de recreo como el jardín del Turia o el parque de cabecera y el Bioparc. Todo ello haciendo de esta una ciudad que cuenta con una destacada posición tanto a nivel español, europeo incluso mundial.
domingo, 31 de mayo de 2009
La Valencia del siglo XX
jueves, 28 de mayo de 2009
Puerto de Valencia
El puerto de Valencia, entendido como una gran infraestructura de carácter permanente destinada al comercio y al transporte de pasajeros, es una obra muy reciente, casi enteramente del siglo XX. Eso no quiere decir que la ciudad de Valencia no se preocupara por su mar o que renunciara al comercio marítimo. Lo que sí es cierto es que a capital valenciana no contó con instalaciones permanentes de embarque y desembarque hasta fechas relativamente recientes.
El primer documento que certifica la existencia de un muelle es de 1432. Se trataba de un sencillo puente de madera que se adentraba en el mar. Gracias al privilegio otorgado el 17 de marzo de 1491 al caballero valenciano Antoni Joan por el Rey Fernando El Católico, cuando se puede relacionar el puerto de Valencia con una explotación debidamente portuaria. La forma de este puente, su exposición a la corrientes marinas y las avenidas del río Turia pronto lo inutilizaron, y en 1555 ya no funcionaba. En el siglo XVII, con las renovaciones oportunas, esta obra se debió ser la única existente, pese a contar con los primeros proyectos reales de construcción de un muelle perdurable de piedra. En 1676 y 1685 se conocen intentos de diseñar unas instalaciones dignas para el comercio, coincidiendo con el derecho concedido a Valencia de ser puerto de tráfico de mercancías para otros reinos. Comenzadas las obras en diversas ocasiones, nunca se llevaron a término hasta bien entrado el siglo XVIII.
La dificultad de construir cualquier tipo de infraestructura estable fue tal, que en ese siglo se pensó incluso en la conveniencia de construir el puerto de Valencia en Cullera y unirlo con la capital a través de un canal navegable que atravesara la Albufera. Tenemos que esperar hasta 1792, cuando Manuel Miralles traza y comienza a ejecutar un diseño de puerto que será recurrente a partir de ese momento. La segunda mitad del siglo XIX y, sobre todo, el XX son los momentos de auténtico progreso de las obras del puerto de Valencia. Hay que destacar, como punto de partida importante, el proyecto de Subercase de 1852, con el diseño de los diques rectilíneos y convergentes con una división interior transversal y una escollera exterior. En 1856, este proyecto es reformado, abandonándose algunas propuestas y llegándose al diseño de Juan B. Llovera de 1867 que prolonga el dique de levante hacia el este, consolidándose como referente para futuras ampliaciones.
El siglo XX comenzó con el problema de los aterramientos, que no se solucionó hasta la ejecución del proyecto de Maese en 1921, que contemplaba el desvío de la desembocadura del río y la construcción del dique del Turia y se continuó la expansión del puerto y sus obras: un dique exento, los muelles de Levante y el revestimiento del de Poniente. Después de las destrucciones de la Guerra Civil, las obras progresaron con más lentitud. La saturación del espacio interior hizo que el puerto continuara su expansión perpendicular a la costa con nuevos diques y muelles en dirección sur y prolongaciones de los exteriores: el nuevo dique del Este, la gran defensa paralela al litoral y el de levante.
El puerto se ha ensanchado hacia el mar, ganando espacio siempre en dirección sur y este y consumiendo algunos espacios de uso público, como la playa de Nazaret. De la nada del siglo XVII se ha pasado a unos e los grandes puertos del Mediterráneo.
A principios del 2006 el Puerto de Valencia es, según fuentes del Ministerio de Fomento, el primer puerto español en tráfico de contenedores y se encuentra entre los 10 primeros de Europa en cuanto a tráfico de mercancías y los cincuenta puertos del mundo en el movimiento de contenedores.
El Puerto de Valencia acoge también un tráfico regular de pasajeros con las Islas Baleares e Italia y un emergente mercado de cruceros que en 2005 registró 110 escalas y 106.502 pasajeros.
martes, 26 de mayo de 2009
Una ciudad aún bastante provinciana
Adentrándonos ya en pleno siglo XIX, vemos como Valencia poco a poco y al compás del resto de España. Aún así en el segundo decenio del siglo XX la vida en esta ciudad conservaba todavía muchos aspectos tradicionales, que le daban un toque provinciano.
Pese a los progresos técnicos y a la insurgencia de las clases modestas, pues la sociedad continuaba aún muy jerarquizada. Las diferencias sociales se manifestaban claramente en la forma de vestir y también por el idioma: el castellano se convirtió en signo distintivo de las clases dirigentes y el valenciano propio de las populares.
por las mañanas, los labradores de la huerta llenaban las calles de la ciudad; llevaban sus vacas y las ordeñaban en las puertas de las casas de los clientes: la leche se vendía directamente al consumidor, sin ningún intermediario. Había bastantes mendigos, sobretodo en la puerta de los templos y en el Mercado. Todos los servicios públicos estaban atendidos con gran modestia. Apenas se había iniciado la renovación de las casas y de las calles de la ciudad, que en su conjunto resultaba vieja, modesta y bastante impersonal.
la burguesía valenciana había aceptado sólo en parte el modernismo arquitectónico, que acabó rechazando.
Casi todo el transporte era aún de tracción animal; los automóviles eran muy pocos y todos de lujo. La aristocracia y la burguesía iban a lucir su status al paseo de la Alameda, en berlinas con troncos de caballos y cocheros con chistera los más pudientes, y en galeras de un caballo y cochero con gorra de plato los menos ricos. El vehículo económico de alquiler eran las tartanas.
Funcionaban bastantes teatros, algunos de los cuales eran de nueva construcción, como el Eslava, en la calle Ruzafa, el de Olympia, el Lírico y el Martí, actualmente cine Lys. Además se celebraban sesiones de cinematógrafo en diversos cafés.
Historiadores señalan que la industrialización incompleta del País Valenciano determinaba la debilidad de su burguesía, entonces único destinatario de la cultura y único consumidor del arte.
La actitud provinciana siempre es pasiva y acepta con modestia que todas las innovaciones sean de los otros, respecto a los que los provincianos se reconocen como ciudadanos de segunda categoría. Esto se debía a que la ciudad había vivido con resignación en el período anterior el traslado de Sorolla, Benlliure y Blasco Ibáñez a Madrid; lo mismo estaba sucediendo en este momento en el que Altamira, Azorín, Niró o Chapí también emigraban a ciudades más ambiciosas.
Una curiosidad de la época es que el tenis y el fútbol fueron en sus inicios deportes aristocráticos que ya empezaban a contar con instalaciones propias. Sin embargo, el fútbol alcanzó rápidamente gran popularidad como deporte y como espectáculo para el gran público. En 1919 se fundó el Valencia Foot-Ball Club, que en 1923 se trasladó de su campo de Algirós al nuevo de Mestalla. El equipo rival era el Gimnàstic F.C., que en los mismos años también cambiaría de campo.
En el ensanche de Valencia abundan edificios con estilo afrancesado que responden al deseo de ostentación y confortabilidad de una burguesía seducida por el París de la Belle époque.
la Casa de Correos y Telégrafos, inaugurada en 1923, en la plaza de Castelar, (hoy del ayuntamiento) se puede clasificar dentro del eclecticismo ostentoso y afrancesado, con sus cúpulas de pizarra con grandes ojos de buey, y la profusión de estatuas, escudos y balaustres. Al principio disponía en el centro de una torre metálica para las comunicaciones inalámbricas.
domingo, 24 de mayo de 2009
EXPOSICIÓN REGIONAL VALENCIANA
El Himno de la Comunidad Valenciana fue utilizado por primera vez en la Exposición Regional Valenciana de 1909. Pero no sería hasta 1925 cuando fue aprobado por los alcaldes de los ayuntamientos de Alicante, Castellón de la Plana y Valencia.
Esta exposición fue el momento en que Valencia se mostró, por primera vez en el siglo XX, como una región pujante, creativa, laboriosa y dispuesta a estar presente en el proyecto nacional. En esta exposición, la ciudad quiere recordar aquel momento y reafirmarse como escaparate de los cambios y retos del siglo XXI, ya que cien años después Valencia vuelve a dar un salto hacia la modernidad con todos los proyectos que se están desarrollando.
En cuanto al Himno…
Su música la compuso José Serrano y la letra la compuso Maximiliano Thous, que lo hizo tanto en valenciano como es castellano.
En el año 1909 se celebró la Exposición Regional Valenciana. Debido a este evento, se encargó la creación de un himno para esta exposición al maestro José Serrano Simeón, quien se encargaría de la música. Mientras que Maximiliano Thous se encargó de la letra. Aunque se aceptó de una manera espectacular no faltaron las críticas, sobre todo por parte de los “blasquistas” y nacionalistas valencianos por la frase “per a ofrenar noves glòries a Espanya…” . Para el maestro Serrano, en cambio no suponía ningún problema: “España, mis himnos y yo. Uno de mis grandes amores es esta tierra valenciana donde he nacido: pero siempre que he compuesto un himno he pedido a mis colaboradores que en el primer verso aparezca la palabra "España" [...] y así comienzan mis tres himnos. Himno a Valencia: Para ofrendar nuevas glorias a España; Valencia Canta: Madre de España, Sol de Valencia...; La canción del soldado: Soldado soy de España... Eso no es obstáculo porque mis hijos hablan perfectamente el valenciano. Así entiendo yo el regionalismo”.
Aún así, no pasó mucho tiempo cuando los alcaldes de las tres provincias de la Comunitat decidieran que aquel himno se convirtiera en el himno del Reino de Valencia, en mayo de 1925.
Para ser declarado himno oficial, fue necesario un informe que debía ser tramitado en las Cortes Valencianas. Y que se tramitó en 1981, desde entonces se conoce como himno oficial de la Comunidad Valenciana.
HIMNO DE VALENCIA
Pero antes de explicar su historia o quién fue el compasitor que la hizo, en definitiva, antes de entrar en detalles, aquí os escribo uno de los himnos con más historia de nuestro país.
Per a ofrenar noves glòries a Espanya,
tots a una veu, germans vingau.
¡Ja en el taller i en el camp remoregen,
càntics d'amor, himnes de pau!.
que avança en marcha triomfal!
Per a Tú la vega envia
la riquessa que atresora,
i es la veu de l'aigua càntic d'alegria
acordat al ritme de guitarra mora.
Paladins de l'Art t'ofrenen
ses victòries gegantines,
i als teus peus, Sultana tons jardins estenen
un tapiç de murta i de roses fines.
Brinden fruites daurades
els paradisos de les riberes,
pengen les arracades
baix les arcades de les palmeres.
Sona la veu amada
i en potentíssim, vibrant ressó,
notes de nostra albada
canten les glòries de la Regió.
Valencians: en peu alcem-se
que nostra veu
la llum salude
d'un sol novell.
Per a ofrenar noves glòries a Espanya,
tots a una veu, germans vingau.
¡Ja en el taller i en el camp remoregen,
càntics d'amor, himnes de pau!
¡Flamege en l'aire
nostra Senyera!
¡Glòria a la Patria! ¡Visca València!
miércoles, 20 de mayo de 2009
ESTACIÓN DEL NORTE
La Estación del Norte es la principal estación de ferrocarril de la ciudad de Valencia.
Se encuentra ubicada en el centro de la ciudad, junto a la Plaza de toros y a apenas 200 m del ayuntamiento. La entrada principal a la estación está situada en la calle Játiva 24, aunque también cuenta con otro acceso en la calle Bailén esquina Matemático Marzal.
El conjunto de vías y edificio está flanqueado por las calles Alicante y Bailén al este y oeste respectivamente y Játiva al norte. Al sur discurre el haz común de líneas ferroviarias que parten de esta estación terminal.
Fue construida entre 1906 y 1917 aprovechando las transformaciones urbanísticas de la ciudad a finales del siglo XIX siendo uno de los monumentos más emblemáticos de la arquitectura civil de la ciudad.
La obra es de estilo modernista, diseñada por el arquitecto Demetrio Ribes, en la que se aprecian las influencias de la vertiente europea de la Sezession, caracterizada por un modernismo de líneas rectas en contraposición a las formas sinuosas más típicas del modernismo valenciano. Para su construcción se emplearon nuevos materiales introducidos a finales del siglo anterior, como la estructura metálica en forma de marquesina.
La fachada de la estación cuenta con tres cuerpos de edificación resaltados en forma de torreones. Estos cuerpos se sitúan a los extremos y en el centro. La portada, con motivos vegetales, naranjas y flores de azahar, se inspira en la agricultura valenciana e incluye, entre otras referencias a la ciudad, las cuatro barras rojas sobre fondo oro del escudo heráldico valenciano.
En su vestíbulo, una combinación de maderas, cristal y mármol. Tiene un sinfín de elementos decorativos de cerámica, madera, metal, vidrio y otros materiales.
La cubierta principal de la nave central, que cubre las vías, tiene forma de arco y guías que representan las vías del tren. Asimismo, tiene una gran abertura longitudinal destinada a que antiguamente escaparan los humos de las maquinas a vapor.
El edificio es de planta rectangular con dos partes diferenciadas:
- el gran hangar, de planta igualmente rectangular y cerrado con estructura de arcos articulados de acero laminado.
- el edificio de viajeros propiamente dicho, de planta en U y pilares independientes de la estructura del hangar.
La planta baja está exclusivamente destinada el público, mientras que el entresuelo y primer piso se destinan a oficinas.
Estilísticamente este edificio puede ser relacionado con la secesión vienesa y especialmente con Otto Wagner, a cuya influencia se añadirían, por un lado reminiscencias del gótico perpendicular inglés junto con inicios de lo que más tarde sería el racionalismo. Por oposición a esta sobriedad estructural se superpone en las fachadas una profusa decoración de elementos cerámicos y temas inspirados en la agricultura valenciana. A estos elementos de claro valor simbólico se añade la repetición constante del escudo de la ciudad como remate de las marquesinas.
Curiosidad: los zócalos de cada puerta o ventanal interior del vestíbulo están hechos de madera y en los más altos se puede leer el lema "buen viaje" en distintos idiomas.
PLAZA DE TOROS DE VALENCIA
Se encuentra ubicada junto a la Estación del Norte de Valencia.
La Plaza de Toros de Valencia fue construida entre los años 1850 y 1860 en el solar de una plaza anterior que por problemas de presupuesto nunca llegó a terminarse. En 1850 el Gobernador Civil de Valencia Melchor Ordóñez en colaboración con la Junta del Hospital encargó el proyecto de la plaza al arquitecto valenciano Sebastián Monleón. inspirada en la arquitectura civil romana, el teatro de Flavio Marcelo (Coliseo), o el anfiteatro de Nimes (Francia).
Su estilo arquitectónico es dórico sencillo y su estructura forma un polígono de 48 lados con más de 17 metros de altura y 52 de diámetro del ruedo. Con estas dimensiones la hacen una de las plazas más grandes de España.
La Plaza ha sufrido varias modificaciones arquitectónicas a lo largo de su historia. La primera, tras un incendio, en 1946; en 1968 se llevó a cabo la reducción del ruedo y la ampliación de gradas; en 1995 se ampliaron las barreras y contrabarreras dejando el aforo en las actuales 12.884 localidades. La plaza de toros dispone de Patio de caballos, Capilla y Patio de cuadrillas, Enfermería, Puerta grande, Palco presidencial, Corrales, Chiqueros.
Los primeros festejos celebrados en la plaza se produjeron los días 3, 4 y 5 de agosto de 1851 en los que José Redondo "Chiclanero" estoqueó en solitario toros de las ganaderías de Duque de Veragua, de Marqués de Casa Gaviria y de Duque de Osuna. Sin embargo la inauguración oficial se realizó durante los días 20, 21 y 22 de junio de 1859, en las que actuó como único espada Francisco Arjona "Cúchares", lidiando reses de las ganaderías de Viuda de Zalduendo y de Nazario Carriquiri.
Durante el paso de los años, su gestión ha ido alternándose, habiendo sido gestionada tanto por empresa privada como por gestión directa por la propia Diputación de Valencia. Actualmente es propiedad del Hospital General, siendo administrada por la Diputación Provincial.
Sus carteles taurinos son de los más populares de España.
viernes, 15 de mayo de 2009
Nos adentramos en una nueva etapa
La demolición de la muralla y el posterior inicio del Ensanche premitieron abordar el viejo problema urbanístico de enlazar el núcleo de la ciudad con el Grau. El incremento del comercio de exportación y el desarrollo de los poblados portuarios hacían más necesario el acercamiento al mar. Así la ciudad se anexionó de derecho en 1897 la Vilanova del Grau y el Poblenou de la Mar. Se remodeló toda la zona que rodeaba la antigua Puerta de la Mar. Muchos espacios verdes, entre ellos el Pla del Remei, la Glorieta y el Parterre, enlazaron por el puente de la Mar y el antiguo camino del Grau con la calle Colón y la plaza de Tetuán y el resto de bulevares en que se había convertido la antigua ronda de la muralla.
El sector meridional del Ensanche (entre los portales de la Mar y de Ruzafa, y limitado por una Gran Vía, inicialmente llamada "de las Germanías") fue el primero y mejor que se desarrolló. Este ensanche surgió al derribar la muralla, como una zona residencial donde la nueva burguesía construyó unas viviendas representativas de su status.
El plano de esta primera fase dle Ensanche de Valencia se aprobó en 1887. Era de tipo hipodámico inspirado muy directamente en el plano del Ensanche de Barcelona de 1859. Se trata de una disposición ortogonal, con vías largas, rectas, paralelas y bastante anchas. Este es el momento en el que cambia la unidad urbana, dejando de ser esencial el barrio y dejando paso a la manzana de casas, delimitada por calles perpendiculares, proyectadas en función de arterias de tráfico.
La uniformidad de estas manzanas de casas, tan homogéneas, sólo quedaba rota por una calle diagonal, la de Sorní, que va desde el antiguo portal dels Jueus, derribado en 1880 hasta el puente de la Mar y camino del Grau.
La falta de espacios verdes es el defecto principal del ensanche de Valencia, a pesar de ello el carácter ortogonal de sus calles y sus chaflanes ofrecen una red viaria muy superior a la de muchas ciudades del mundo.
CURIOSIDAD
Fue en este siglo cuando se inauguró el Cementerio general (1807) en el camino de Paiporta sustituyendo el cementerio propio que tenían todas las iglesias parroquiales.
lunes, 11 de mayo de 2009
MONASTERI DE SANT MIQUEL DELS REIS
Aunque no pertenece, o no se encuadra en lo que es el casco histórico de la ciudad de Valencia, no podemos pasar por alto el "Monasteri de Sant Miquel dels Reis". Gran monasterio renacentista donde están enterrados sus promotores: la virreina Germana de Foix y su esposo el duque de Calabria, don Fernando de Aragón.
Después de acoger durante siglos órdenes religiosas que gestionaron el convento y de asumir otras funciones no tan notables como la de cárcel o almacén de bienes culturales, su rehabilitación integral ha convertido el monasterio en sede de la Biblioteca Valenciana y en recinto para actos protocolarios de la Generalitat.
Su ubicación en medio de la huerta, lejos del centro urbano, como comentábamos anteriormente, ha mantenido este monumento en el olvido pese a su indudable valor artístico.
Dos de sus estancias más destacadas son la Iglesia y el claustro.
Iglesia
La influencia herreriana se nota especialmente en la concepción de este templo, de una sola nave, planta de cruz latina, con el coro en la parte posterior y el altar mayor en alto. Debajo del presbiterio se encuentra la cripta de los virreyes. Una cúpula idéntica a la de El Escorial corona el crucero.
Claustro
Es un buen ejemplo de claustro renacentista del siglo XVI, desarrollado por los arquitectos Juan Barrera y Martín de Orinda según el proyecto de Alonso de Covarrubias. El edificio disponía de otro claustro más antiguo. En torno a ambos se han dispuesto todos los servicios bibliotecarios.
Los virreyes quisieron hacer de este monumento un monasterio cuidado por la orden de San Jerónimo donde conservar su legado cultural y sus restos mortales. Por eso, intentando prolongar su espíritu renacentista, ha sido acertado ubicar la Biblioteca Valenciana.
Dato anecdótico:
Al no haber permanecido en pie el palacio Real, el monumento de "Sant Miquel dels Reis" pasa a ser el principal testimonio patrimonial de los virreyes de valencia. Su voluntad era convertirlo en un Escorial en pequeño. Germana de Foix, sobrina de Luis XII de Francia, ejerció de virreina y lugarteniente desde 1523. Se casó en terceras nupcias con el duque de Calabria, Fernando de Aragón. En su testamento dejó escrita la orden de construir el monasterio. Las obras se iniciaron diez años después de su fallecimiento, y se tardaron cien años en su construcción.
domingo, 10 de mayo de 2009
MERCADOS MODERNISTAS
Esta ciudad es una de las que posee mayor volumen de obra modernista de España, pues la burguesía asimiló perfectamente este estilo. El modernismo se introdujo con la arquitectura, aplicada a grandes obras públicas y a viviendas,y posteriormente pasó a la pintura y a la escultura.
Asímismo, el empuje comercial que adquirió la ciudad con la llegada del ferrocarril, la apertura de mercados de cítricos y la incipiente industrialización siderúrgica se plasmaron en la construcción de dos grandes mercados urbanos, Central y de Colón, a los que se les aplicó la estética del modernismo.
Mercado de Colón
Su construcción de realizó en el ensanche burgués para ofrecer un servicio más selecto y cercano a los vecinos. El arquitecto Francisco Mora lo levantó entre 1914 y 1916 con la colaboración de especialistas en "trencadis", azulejo roto, cristal y hierro.
Mercado Central
Construido por Alejandro Soler y Francesc Guardia entre 1916 y 1928.
Este mercado ayudó a transformar el centro histórico y modificar su trama viaria.
Actualmente, más de 1200 puestos de venta con 1500 empleados mantienen viva la tradición de los mercaderes.
Es el claro ejemplo de una excelente fusión del hierro, cristal, piedra, cerámica y ladrillo.
miércoles, 6 de mayo de 2009
PALACIO DEL MARQUÉS DE DOS AGUAS
La familia Rabassa de Perellós obtuvo en 1699el marquesado de Dos Aguas. Tenía su casa señorial en un palacio gótico con torre almenada. En 1740 Ginés Rabassa quiso realizar una reforma y encomendó la obra a los artistas Hipólito Rovira, Ignacio Vergara y Luis Domingo. Incorporó también la portada de alabastro, la cúpula de la escalera principal y los frescos de la fachada.
Un siglo después se emprendió otra remodelación que acentuó el aspecto suntuario.
La portada barroca, realizada en piedra alabastrina de las canteras de Picassent, es, sin duda, la imagen más popular del palacio. Constituye una alegoría sobre el agua y el río con la enigmática presencia de dos gigantes semidesnudos.
Desde 1954 es sede del museo creado con la colección de cerámica de Manuel González Martí., y en 1971 fue ampliado en su parte posterior, con una nueva torre, respetando rigurosamente la unidad de estilo.
El museo permite conocer ejemplares únicos de mobiliario de Dresde con apliques de porcelanas de Meissen y Berlín, y otros muebles procedentes de la residencia de los marqueses situados en el salón de Baile y en la sala Japonesa.
La azulejería valenciana de los siglos XVIII y XIX se encuentra muy bien representada en el museo. Pueden contemplarse paneles devocionales, escenas procedentes de cocinas y azulejos de contrahuella. La reconstrucción de una antigu y elegante cocina valenciana despierta gran interés y curiosidad entre los visitantes.
Curiosidad: la Carroza de las Ninfas, procedente del antiguo edificio de los Rabassa, se conserva en el museo. Se trata de una berlina realizada en 1750 por los artistas Rovira y Vergara, autores también de la fachada barroca. Es un ejemplar único, de gran elegancia, y un brillante símbolo de los usos y costumbres de la aristocracia valenciana.
martes, 5 de mayo de 2009
LA LONJA
La Lonja fue construida entre 1482 y 1498. La obra la llevaron a cabo maestros como Pere Compte, Johan Ybarra, Johan Corbera y domingo Urtiaga.
Es el monumento gótico más importante de la ciudad, representativo de la época dorada de Valencia, como fue el siglo XV. Su construcción fue financiada por el primer banco valenciano: "La taula de canvis", creado para sufragar las transacciones comerciales.
Como contrapeso al poder religioso que la ciudad medieval generó en el entorno de la catedral, el poder mercantil y comercial fue marcando su impronta en los alrededores de la plaza del Mercado. Este monumento gótico de Pere Compte, que guarda similitudes con el de Palma de Mallorca, es el más brillante ejemplo de templo profano donde adorar el poder del dinero.
La Lonja está formada por cuatro partes: la Torre, la sala del Consulado de Mar, el salón columnario y el patio de los naranjos.
Destacamos el Gran salón columnario: en el que encontramos 24 columnas monumentales y helicoidales, dejando entre ellas un amplio espacio en el que se colocaban las tradicionales mesas y taburetes con el nombre del comerciante. El
Patio de los Naranjos, como es conocido el patio de la Lonja. A este jardín se accede por una puerta de cristal. Cuenta con una pequeña fuente y un nombre considerablede naranjos, a los que debe su nombre. De este patio parte una escalera de piedra que conduce a la sala de juntas del Consulado del Mar. Además está protegido por una muralla que lo aisla de las callejuelas que rodean el edificio.
Curiosidad:
El arquitecto Pere Compte no tuvo inconveniente en rodear el salón columnario con un mensaje sobre el poder de la riqueza, y dejó escrito: "Casa famosa soy, en quince años edificada. Compatricios, probad y ved cuán bueno es el comercio que no lleva fraude en la palabra, quejura al prójimo y no le falta, que no da su dinero con usuras. El mercader que vive de este modo, rebosará en riquezas y gozará por último de la vida eterna".
lunes, 4 de mayo de 2009
TORRES
DATO ANECDÓTICO
viernes, 1 de mayo de 2009
Tribunal de las Aguas
La puerta de los Apóstoles de la catedral de Valencia acoge cada jueves a las 12 h. el Tribunal de las Aguas, que se encaraga de resolver mediante juicios orales los pleitos surgidos entre agricultores por el uso inadecuado de la red de acequias de la huerta valenciana. Las acequias que forman parte de este tribunal son: Quart, Benàger i Faitanar, Tormos, Mislata, Mestalla, Favara, Rascanya y Rovella.
Tratándose de un tribunal consuetudinario, como es este, está formado por un representante de cada Comunidad de Regantes, de ellos uno es elegido durante un tiempo indeterminado como presidente.
Aunque no está nada claro, el origen de este tribunal está ligado a los tiempos de los musulmanes, época en la que los riegos del río Turia tenían ya su régimen. Cuando los árabes, artífices de las canalizaciones en Valencia fueron expulsados, por privilegio de Jaime I de 1239, los repobladores fueron autorizados a regar con las acequias según los usos establecidos por los árabes.
Actualmente, aunque sigue teniendo vigencia y utilidad social, no tiene la misma importacia que tenía antaño. Dejó de tenerla no hace mucho, solo es necesario que nos remontemos al año 1950, cuando entró en funcionamiento el pantano de Benagéber, que regula los caudales de río Turia. Es tal la expectación que causa entre los turistas, que muchos consideran que corre el peligro de convertirse simplemente en un "teatro de calle".
La Catedral
La Catedral de Valencia fue en un primer momento una mezquita que en 1238 fue convertida en catedral al ser restaurada la Seo valentina. Pero no sería hasta 1262 cuando el obispo Andreu d´Albalat mandó iniciar la construcción de la catedral gótica de Valencia, de tipo cisterciense, con la nave central poco alta y las dos laterales muy anchas. Inicialmente no tenía transepto, y su simplicidad decorativa obedecía a la austeridad de la Orden del Císter . La estructura de la seo, según detreminados historiadores tiene una influencia directa de la catedral de Tarragona, sobre todo si atendemos al diseño de los voluminosos pilares rodeados de columnas gemelas y el trazado cuadrado de la nave mayor.
La puerta románica de la Almoina de la catedral de Valencia. La cornisa de la cual simula estar sostenida por catorce cabezas, alternadas de hombre y de mujer, que según la tradición representan a los siete matrimonios leridanos que trajeron a Valencia setecientas doncellas de Lérida para casarlas con los repobladores de la ciudad liberada de los musulmanes.
A partir de 1303 la construcción fue continuada por el maestro Nicolás de Autona. Esta vez en un estilo francés más suntuoso. Este construiría el transepto con el cimborrio y la puerta de los Apóstoles, con estatuas góticas naturalistas. El cimborrio cuenta con dios cuerpos octogonales con arcadas treboladas y bellas tracerías. La simplicidad y sobriedad de la catedral se explican, entre otras cosas, por qué no fue una obra santuaria de ningún monarca, sino una construcción ciudadana sufragada por la burguesía local.
Las obras de la Seu tuvieron un gran impulso en el siglo XV: se terminó la torre de El Micalet, que ya se había iniciado en 1381, durante el gobierno del obispo Jaime de Aragón. No me voy a centrar en esta torre que ya he explicado en anteriores publicaciones. De esta manera en 1426 se decidió ampliar la catedral, fue con el trazado del valenciano Francesc Baldomar con el que Pere Compte la llevó a la práctica, que terminaría en 1480. En esa ampliación, el Micalet, que hasta entonces había sido una torre exenta a la catedral, fue adherido. Martí Llobet se encargó de terminar el cimborrio o linterna en 1430, y de restaurar la puerta de los apóstoles. El realismo burgués fue sustituido por un mundo renacentista mucho más artificial. Esta influencia también llegó a la Seu, cuando se construyó la capilla de alabastro del trasaltar de la girola, construida en 1510. Además también se le añadió al lado de la puerta gótica de los Apóstoles la "Obra nova" de arcos y galerías de este estilo, que inició Miquel Porcar e 1566. Son conocidos popularmente como "els balconets de la Seu". Entre 1674 y 1682 fue construido el fastuoso presbisterio de la Seo, de polícroma riqueza de mármoles y bronces. Fue obra de un gran arquitecto del barroco valenciano, el aragonés Juan Bautista Pérez Castiel.
En su última etapa, el barroco valenciano empezó a romper cornisas y a curvar el parlamento de las fachadas, es el caso de la la fachada meridional de la catedral, popularmente conocida como "la porta dels ferros", obra del alemán Konrad Rodulf en 1703.
En el último cuarto del siglo XVIII, el arquitecto Antoni Gilabert revistió la catedral de un paramento neoclásico que le daba unidad y sustuosidad.
Una vez terminada la Guerra civil espanyola, se dispuso el coro en el ábside y el altar mayor en el centro del crucero, obra de Vicente Traver en 1943. Años más tarde, en la década de los 70, se recuperó el estilo gótico de las naves del templo.
martes, 28 de abril de 2009
BASÍLICA VIRGEN DESAMPARADOS
Está ubicada en la Plaza de la Virgen, frente a la Fuente Del Agua de la Acequia, en el centro de la cual se sitúa el dios Neptuno representando al río Turia y sus 8 acequias principales alrededor: Rascanya, Tormos, Mestalla, Mislata, Rovella, Favara, Benàger i Faitanar y Quart. Dos de sus puertas dan a esta plaza, y una tercera da al pasaje que separa la basílica de la Catedral. En esta tercera puerta hay una ventanilla enrejada a través de la cual puede contemplarse el interior cuando la basílica se encuentra cerrada y puede contemplarse la Virgen iluminada. Excavaciones realizadas en La Almoina indican que la zona donde está situada la Basílica se corresponde con el foro romano de la ciudad de Valencia.
La basílica de la Virgen de los Desamparados es el principal edificio religioso construido en el siglo XVII, templo de la que ya empezaba a ser la Patrona de Valencia. Desde 1487, la “Cofradía de Santa María dels Innocents i Desemparats” cpntaba con una pequeña capilla en el muro exterior de la Catedral, que fue ampliada en 1555. En aquella capilla se había depositado transitoriamente la imagen de la Virgen de los Desamparados, antes de su instalación en el santuario del Capitolet de la cofradía, en 1595. Sin embargo, la santa imagen fue trasladada de nuevo en 1623 a la capilla de la plaza de la Seu, de dimensiones reducidas a pesar de una nueva ampliación. Durante la terrible epidemia de 1647, los valencianos imploraron la protección de la Virgen, a la que se le atribuyó la cura del virrey Conde de Oropesa, y el fin de la peste, que había causado la muerte de 18.000 personas dentro de la ciudad.
La nueva capilla fue construida por el arquitecto Diego Martínez Ponce de Urrana, entre los años 1652 y 1657. Destacan las formas clásicas, que refuerzan los valores renacentistas de la proporción, la simetría y el equilibrio. En cambio, el interior de la basílica es un compendio renacentista-barroco. Se trata de la primera planta oval que se realiza en Valencia para un templo religioso, entre otras cosas, la pasión por la Virgen de los Desamparados tuvo que ver en la elección de la planta oval, pues esta forma geométrica aludía a un símbolo mariano. Como ya hemos mencionado, de planta ovalada, con disposición central bajo la gran cúpula, que simbolizaba la totalidad y la unidad de la Iglesia Católica romana. Fue decorada con un espectacular fresco por Palomino, pintor y tratadista andaluz.
La Virgen de los Desamparados es la patrona de la ciudad y de la Región. Está situada en el majestuoso altar mayor de su templo, con una suntuosa decoración. Los valencianos, grandes devotos suyos, hablan a su patrona en lengua materna, como también a veces, le canta la escolanía. Cada año, el segundo domingo de mayo, se celebra la fiesta en honor de la Virgen.
(Momento del traslado en el que los valencianos muestran su fervor hacia la Virgen)
domingo, 26 de abril de 2009
PALAU GENERALITAT
Actualmente este edificio es la sede de la "Generalitat Valenciana", el gobierno regional de la Comunidad, además es un símbolo de la unidad y de la identidad de la Comunidad Valenciana. Pero no siempre ha sido así. Desde que empezara a construirse, diversos son los usos que se le han dado:
De 1421 a 1705, fue la Casa de la Diputación del General del Reino de Valencia.
De 1750 a 1923: Real Audiencia.
De 1923 a 1982, ejerció como Diputación Provincial.
De 1982 a 2009, es lo que conocemos como Generalitat Valenciana. Situado en pleno corazón de la ciudad de Valencia, en el barrio de la Seo, dentro del conjunto monumental de la Catedral, de la Basílica de la Virgen de los Desamparados y la Torre de El Micalet. El Palau está en la calle Caballeros, a la que da entrada, siendo esta la arteria urbana más importante de la ciudad medieval donde los nobles abrieron sus palacios. La sede del Gobierno Valenciano, como también es conocido este palacio, ocupa un edificio gótico integrado por tres elementos de origen diferente y de estilos diversos:
- El torreón antiguo: tiene tres pisos y está orientado hacia la plaza de la Virgen. La obre que fue proyectada por el maestro Montano, empezó a construirse en 1518. su construcción fue un tanto dificultosa puesto que lo que comenzó con estilo gótico terminaría con el herreriano, pasando por el renacentista.
-El cuerpo central tiene acceso por la calle Caballeros. Esta es la parte más antigua del Palacio: era una vivienda particular de un noble (Jaume Desplà) a la que con el tiempo se añadieron otras casas colindantes conforme las necesidades de la institución lo precisaban. En su fachada se contemplan seis ventanas rectangulares que se corresponden con el entresuelo del edificio. En el piso principal destacan seis ventanas triples y una galería con dieciseis arquillos; cerrado por un tejado con dos vertientes.
-El torreón nuevo, que da a la Plaza de Manises, fue construida en el siglo XX. Para su construcción se utilizaron las mismas canteras que habían sido utilizadas para el antiguo torreón. Así se igualaba a la perfección la estética de las dos torres.
-El jardín situado bajo la fachada del antiguo torreón, sustituye la antigua Casa de la Ciudad o ayuntamiento, que estaba en muy mal estado.
En 1931 fue declarado Monumento Histórico-Artístico Nacional. Y es que no solo es espectacular por su arquitecctura sino también por sus numerosas obras de arte: pinturas, azulejería, muebles... que son un exponente del arte y los artistas valencianos de todos los tiempos.
Entre sus estancias destacamos el "Salón Dorado", situado en el entresuelo del antiguo torreón. Conserva un luminoso artesonado. En los numerosos cuadrados en que está dividido aparecen caras de madera policromada rodeadas de símbolos abstractos repujados en oro. En este salón se celebran las audiencias del presidente de la Generalitat. Y el "Salón de Cortes", al que se accede por el primer piso tras atravesar una elegante puerta renacentista. de planta rectangular, este salón tiene un preciado artesonado renacentista sin pintar rodeado por una galería. Grandes murales representan los tres brazos de las antiguas Cortes: eclesiástico, nobiliario y popular.
viernes, 24 de abril de 2009
MICALET
Esta torre de estilo gótico, era más conocida como "campanar nuevo" o "campanar de la catedral", así le resultaba más fácil a la gente porque lo diferenciaban del "campanar viejo". Sin embargo, desde hace algún tiempo es conocido como "El Micalet", denominación, que por anecdótica que parezca no deja de ser real; así era como se llamaba la gran campana de las horas, y por ende así se denominó al conjunto.
La torre, de planta octogonal, mide 50,85 m, siendo su perímetro igual a su altura. Cuenta además con diferentes niveles que ya desde el exterior podemos observar gracias a los prismáticos contrafuertes de las aristas y las finas molduras que decoran el exterior de la torre:
Primer cuerpo: es un cuerpo macizo que únicamente deja libre el hueco de la escalera.
Segundo cuerpo: se trata de un recinto abovedado, que cuenta únicamente con un ventanal, y que era la "prisión" o asilo de la catedral.
Tercer cuerpo: este recinto cuenta con dos ventanales, y como el anterior, es abovedado, aquí se alojaba el campanero.
Último cuerpo: es la sala de campanas, abierta por ocho ventanales.
207 son los peldaños que tiene El Micalet, y que te separan de una magnífica vista de una ciudad tan enigmática como lo es el centro histórico de Valencia.
miércoles, 22 de abril de 2009
FESTIVIDAD SAN VICENTE FERRER
Entre 1368 y 1375, se trasladó a Cataluña a estudiar gracias a sus cualidades intelectuales, donde además ejerció de profesor de lógica. De este período cabe destacar el estudio del hebreo y la influencia que sobre él ejerció su hermano de orden santo Tomás de Aquino. También señalar que su paso por Barcelona sobresale por algunos de los milagros allí realizados.
Pasados los años y siendo el nuevo Papa Pedro de Luna (Benedicto XIII), en 1394, Vicente Ferrer fue nombrado su confesor y teólogo. Ajeno a los sinsabores de la Iglesia, decide alejarse del palacio papal y se asila en el convento de Dominicos de la ciudad.
Una enfermedad cambió su vida por completo: a partir de aquí se dedicó a la predicación itinerante, viajando siempre a pie, recorrió muchos lugares de Europa Occidental.
Tanto su vida más activa del principio como sus veintiún últimos años dedicados a la itinerancia apostólica le facilitaron el tener contacto permanente con judíos y musulmanes, pues él quería que su mensaje llegara a todo el mundo, sin importar la clase, religión…
La última vez que enfermó se encontraba en Francia y su deseo erallegar a Valencia, pero no pudo ser y falleció en Vannes en 1419, en la catedral de la cual se encuentra su sepulcro.
Su canonización llegaría el día 29 de Junio de 1455. Tras votarlo en el consejo de cardenales, Calixto III anunció la canonización de Vicente Ferrer.
En honor a este Santo es que se celebra la festividad de San Vicente Ferrer en la ciudad de Valencia. Tiene lugar el segundo lunes de Pascua, en el que la ciudad se viste de gala y en la que se levantan nada más y nada menos que catorce altares, entre los que destacan el altar del Tossal, situado en el Tossal, el de la plaza de la Virgen, llamado altar de la Pila y el de la plaza del Mercado (del que veremos algunas de las imágenes de la representación del pasado lunes). También destacar el altar más antiguo de la ciudad: el altar del Mar, situado junto al Pouet de Sant Vicent, y que cuenta con casi cien años de antigüedad, (1561).
¿En qué consiste la fiesta?
La fiesta comienza el domingo octava de Pascua. En cada uno de los barrios, que cuentan con un altar, se inicia una procesión que culmina subiendo al santo al altar, donde permanece hasta la noche del lunes, que es trasladado a casa del clavario hasta el próximo año. Pero hasta que llega este momento, el día del lunes está repleto de actos: a mediodía una ofrenda de flores al Santo por parte de todas las asociaciones vicentinas, y ya por la tarde una solemne procesión sale desde la Catedral de Valencia y pasa por Capitanía, antiguo convento de Dominicos (congregación a la que pertenecía San Vicente Ferrer), la casa donde nació el santo y San Esteban, donde se encuentra la pila bautismal de San Vicente. El recorrido de la procesión termina donde ha empezado: la Catedral.